Thursday, November 01, 2012

Un cuarto de kilo


Un cuarto de kilo, si!
De ese jamón de Sevilla señor, por favor …córtelo finito, para que me dure mucho, para que nunca termine de aspirar su aroma y degustar su sabor,
Pero solo un cuarto quiero y puedo…soy pobre y tengo miedo, de quedar en ruinas con este inmenso antojo, y sin fiar señor! No se arriesgue, que esta dama hambrienta no creo que le pague, no porque no quiera, sino porque no puede arriesgarlo a ud y su fortuna, por mi ansiado intento, de disfrutar sin culpa, tan delicioso portento

Acompáñelo si puede con una copa de buen tinto, con vainilla en abundancia y una plato de ricas migas, tal vez hasta lo comparta algún día en mi mesa, con amigos bailarines y larga charla bien risueña

Su receta bien guardada tengo en mis anaqueles, como un tesoro pirata encontrado en los cuarteles, cuando cómplices dormíamos escondidos tras las rejas, de un amor prohibido y por lo mismo mas sabroso

Un cuarto de kilo tan solo eso es lo que quiero…y quedare quietita satisfecha y agradecida, pues alimenta con el mas que un cuerpo…alimenta un alma marchita.

Un dia sin ti..
eternos latidos
que disparan desde mi pecho
hacia tu encuentro, hacia el nido
tibio de tus besos

un dia sin ti,
genera en la piel hielo
y en mi boca desconsuelo
y mirada lejana, niña perdida
y garganta seca de suspiros
huecos

un dia sin ti..no quiero
ni una hora, ni un minuto
porque muero un poco
cuando la flor de mi alma
ya no aspiras, ni en tus manos
guardas


un dia
estare sin ti en el canto
de la sirena, con el dolor del abismo
con la bravura y el desaliento
y sacaré de muy dentro, el susurro del viento
para evocarte y traerte cometa...
complice nocturno que iluminas
y resplandeces, desde el fondo
del silencio.

Celeste

Abismo... hoy te encuentro,
estas solo y esperando
a que una hoja como flotando ligera
distraida caiga a la profundidad de tu boca,
hacia el fondo oscuro y al misterio,
para convertirse en tierra y abono de la esfera.

Circulo eterno el tuyo, complemento del cielo,
en rotacion constante quieres otra vez elevarme al cielo,
Angel iluso, celeste inverso, dame la mano aun temo.

Lejos, donde solo mis sueños llegan,
estas tú compañero de juegos y en un eco
entre montañas escucho tu melodiosa llamada
cuando los tambores del pecho alzan golpes
y brillos de esperanza.

Cerca, donde tu ojos alcanzan,
estoy yo complice de una cruzada,
para aportar al ascenso y creación,
a la consolidación de tu intento,
por recuperar vida en esa tierra tuya,
perfumada por dos semanas.

Juntos


Una mañana de otoño, cuando el sol se asome tierno y tenga la sensación de frio aunque la temperatura diga lo contrario... inventare unas coplas, del viento y el mar, de la risa y el cantar, será necesario esperar a que las hojas caigan, y que el viento arrecie, puesto que hay un tiempo para ello, y un camino que un no recorro.

Una tarde de primavera, cuando las caricias de mariposas en vuelo sosieguen mi alma y el río cante, y yo lo escuche al fin, creare un sendero nuevo, con luz propia y brillo pleno, entonces el verde será vida en el corazón.

Una noche cualquiera, soñaré que estas a mi lado, haciéndome cosquillas, recibiendo mis besos, cuando esa estrella del cielo destelle el carnaval de tus ojos, y mis manos contengan la sabiduría del nuevo día.

Y juntos en ese instante de magia renaceremos un vez más con la juventud y la frescura del deseo realizado.

Espuma de sal


Espuma de sal, oscura niebla hechicera fue boca esa noche de fatalidad.
Quería que vieras mis ojos tristes y el temblor de mis manos, quería dejar atrás esas constantes riñas que de tu corazón emanaban como vertientes malditas, mas aunque yo quiera... eso no es posible, necesitas un muro que contenga tus puños y una almohada de plumas encarceladas sin vuelo alguno, para sentirte en casa, en el hogar del diablo rojo, de furia y tempestuosos vientos.

Un duelo con espada filosa, comenzó una vez desatados los nudos de tu corbata, y agachada tras nuestro lecho escondí mis palomas blancas, serian sangre en tus manos en solo un instante de gemidos y venganzas tardías.

Hoy mis ojos están fijos, en el techo que no es un cielo, esperando un soplo divino que se apiade llevando este cuerpo muerto, sin respuesta, carcelero y preso, en esta cama marchita y limpia, que no dice en sus pliegues y hojas los dolores escritos en mi alma, por amarte sin amarme...por irme sin partir jamás.

Entre el jazmin y lunas



Mientras leía, el cristal de la lampara de lagrimas comenzó a tintinear, la luz de las velas danzaba inquietantemente, ella silente, pálida y asustada retrocedió tres pasos hasta recibir en su espalda un pecho tibio, el mismo que al abrir silenciosamente la puerta dejó entrar la brisa que desde el jardín traía la caricia del perfumado jazmín.
Las velas durmieron oscureciendo la habitación y en un acto reflejo ante el sobresalto, intentó tomar distancia, pero él le dió vuelta con decisión y mirándola fijamente a los ojos recorrió sin prisa su cuello, liberando el cabello del elástico que lo apresaba. En esas miradas estaba el motivo del universo. Dos intensidades que se encuentran inexorablemente, el viento y el fuego, la luna y el mar, la distancia y los pasos.
Sin decir palabras, tomaron sus manos y avanzaron hacia el maravilloso jardín bañado de luna, que acariciaba el gigantesco jazmín rebosante de flores.
Permanecieron cómplices , desnudos ante el tiempo por el deseo contenido hace milenios, él iba despacio descubriendo signos y la mano de ella como un ruego se deslizó sobre la suya atrayéndola hacia su rostro, permitiendo que sus dedos subieran hurgando entre los labios, reconociendo la humedad guardada y prometida.

Como dos ciegos iluminaron el lugar, con besos de un ardor incontenido, con susurros y suspiros que acariciando el cielo, consintieron develando encantamientos eternos, inspirados ambos en el baile del amor, degustando cada centímetro de piel mojada y sudorosa.

Las caricias, que flotando en un instante de magia, donde él y sus grandes manos se apoderaron del cuerpo de su amada.

Femeninas ansias susurrando besos envolvieron el suyo, encontrando sus labios, húmedos y tibios y recorriendo insolentes recovecos, reconocieron la dimension del amor.
Como dos niños con juguete nuevo, rieron descubriendo mas formas de invocar la luna y a los astros fugaces recorriendo el firmamento.

Resplandor


Y si en tu camino una luz te ciega y crees que ese resplandor es un aviso del cielo que anuncia la salvación…

Créeme que puede ser un anuncio , pero no del cielo que sueñas, sino un reflejo del espejo de otra alma que solamente traerá desolación en tu alma hambrienta, sedienta y exhausta, de tanto intento, de tanta ansia, de tantos y tantos sueños abortados

Me hablo entrelineas, me susurro en la oscuridad, uso metáforas simples y complejas, lloro, grito, y me niego a soñar.
Entonces me acoge el silencio y me ampara la tristeza, porque la conozco, porque me conoce y sabe que es el momento de volver a reinar.

Claustro férreo que circunda mis ojos te quiero de hierro, sin pulir y opaco, te quiero de hueso duro y pétreo guardián de mil vidas consumadas, en tres meses de amor primaveral

Muros nuevos construiré, porque así segura podré estar de cerrar los ojos sin soñar, con un amor eterno…alcanzar.

Y en rima, porque la vida lo exige, porque el trabajo lo quiere, y los hijos lo piden… termino el canto y la dicha guardo, para otra vida y para otro instante de luz que ciega y mata un poco…al menos el brillo natural del rumor de la noche.

Con-sentido


Bajaron sus dedos derritiendo la nieve de mi piel desnuda, y en sutil intento regalaronse enteros...

Para seducir mis montes que eternos y blancos esperaban latiendo la llegada de esa brisa precipitada
y alas extendidas dentro del alma silente, volaron sin prisa sobre el continente...para susurrar cánticos de inocentes anhelos, mientras... la miel recorria senderos entre pliegues limpios de seda de oriente, de huellas silentes, de miradas furtivas...

Caracolas despertaron cuando dentelleó tu boca, en la campiña indómita de salvajes garras , que al cazar certeras construyeron sueños de pichones hambrientos...en ese instante, escuché el silbido del viento en mi espalda, presentí el estallido del volcán maduro, presencié tu grito de macho erguido, satisfecho, conmovido ...

Y fui agua consumida, y fuego que arrasa, y nieve pura y blanca, un segundo tal vez...un segundo de la eternidad.


Ansias tenia de besar su cuello, decía que era pétalos de rosa y murmullos de mil anhelos, sabia que su fragancia lograria que pierda los sentidos, desbordando torrentes de mares y cielos.

Placer adquirido por saber el secreto, la clave que permite que las mujeres abramos candados y puertas, y nos volvamos sendero de yerba fresca.

Sus ojos hablan claro, mas que sus palabras, ellos son curiosas metáforas que lee entre líneas, cada compleja ceremonia, se vuelve simple danza, y cada suspiro una comparsa.

Mas, las claves son eternas dudas, los miedos son poderosos truenos, la imagen de ensueño que habita en su alma, es nube y agua, es hielo; eterno desconsuelo.

La separación es en unas horas, aun no aprende como detener el tiempo, que resbala entre la seda de piel desnuda
Cada minuto avanza y las estrellas se alejan en el firmamento....

Llegó el momento


Cambian los tiempos, se caen los aviones, las tormentas feroces se aplacan, florecen los jardines, se acaban los suspiros, el corazón desgastado quiere palpitar mas lento, mas pausado, los ojos quieren brillar, aun la luna se asoma , el silencio de la noche no alcanza aun a mis pensamientos...pero lograré ir en su ritmo hasta acallarlos y vivir tranquila en mi realidad, ahora confusa, pero estoy segura que en cuanto termine este invierno y al fin salga el sol, un picaflor libará en mi jardín permitiéndome aunque sea verlo comenzare a sonreír de nuevo.

por ahora el silencio llega...escuchas?
llega dejaré de hablar para que se apodere del todo y de mi.